¿Sabías que el café siempre ha estado muy ligado al esoterismo?

Leer los posos del café es una práctica muy antigua y se conoce como cafeomancia. Sus orígenes no están del todo claros, pero se cree que se encuentran en Oriente Medio.
Para leer los posos del café dicen que lo mejor es utilizar café de molienda arábica y tazas de color blanco. La idea es disfrutar del café mientras ronda tu cabeza aquello que quieres que respondan los posos que quedarán al final.

La lectura del café se conoce como lectura de la borra del café, lectura del café turco o cafeomancia. Es un arte de adivinación que data desde el origen mismo del café y su sola condición es la de la preparación de un café grueso, espeso, molido, que deje un rastro generoso de borra al ser bebido.
Obviamente NO SIRVEN para la lectura de café las variedades instantáneas, en saquitos u otras formas que no sea el café molido con cierto grosor.
- Algunas corrientes solamente leen la borra como una adivinación del futuro
- Otras dividen en pasado y futuro, trazando una línea imaginaria horizontal, en donde la parte superior es el futuro y la parte inferior es el pasado de la persona que hace la consulta.
- Otra corriente, quizá la más completa, divide en 4 partes la taza y la lectura se realiza considerando de qué lado está el asa del pocillo, es decir si bebes con la mano derecha o la mano izquierda.
Aunque lo más importante en el rito de la lectura de los posos de café es tener la tranquilidad al beberlo y la concentración de aquello por lo que deseamos consultar.